Cadenas productivas de flores, fresas y aves para familias campesinas en Perú

Acerca de este Proyecto

  • Dónde: Andahuaylillas, Huaro, Quiquijana, Marcapata y Urcos (Quispicanchis, Cusco, Perú)
  • Con quién: 200 personas (72 % mujeres)
  • Cuándo: Desde 2024 a la actualidad
  • Junto a quién: Asociación Jesus Obrero-CCAIJO
  • Financiado por: Generalitat Valenciana

Descripción del Proyecto

Retos para el Desarrollo Sostenible

Las comunidades de Quispicanchis, Cusco, enfrentan una serie de desafíos que impactan directamente en su desarrollo sostenible. Entre los más apremiantes está la vulnerabilidad social, reflejada en la pobreza persistente, el limitado acceso a servicios básicos como educación y salud, y la desigualdad de género, que restringe el rol de las mujeres en el desarrollo comunitario. La agricultura, principal actividad económica, enfrenta graves problemas de baja productividad debido a la incidencia de plagas, enfermedades, y falta de capacidades técnicas en los emprendedores agropecuarios. Esto se agrava por la degradación de los ecosistemas, la pérdida de suelos fértiles y el impacto del cambio climático, que altera los ciclos de cultivo y genera inseguridad alimentaria.

Además, las comunidades carecen de acceso al crédito, lo que limita la adquisición de insumos, equipamiento y tecnología, indispensables para mejorar la producción y agregar valor a sus productos. La falta de infraestructura y mercados competitivos impide la comercialización efectiva, perpetuando los bajos ingresos. En el ámbito educativo, las carencias en formación técnica y acceso a recursos contribuyen a la precariedad de las cadenas productivas. Superar estos retos requiere una combinación de políticas inclusivas, capacitación técnica y programas de financiamiento que impulsen un desarrollo sostenible y resiliente.

Empoderando a las Comunidades Campesinas: Mujeres como Motor de Cambio

Apoyamos a 200 personas de comunidades campesinas en Andahuaylillas, Huaro, Quiquijana y Marcapata, en la provincia de Quispicanchis, Cusco. De este grupo, el 70% son mujeres en situaciones de vulnerabilidad, muchas de ellas víctimas de violencia familiar, que además son responsables del cuidado de una media de cuatro hijas e hijos. Estas mujeres y sus familias son el corazón del proyecto, que busca empoderarlas y fortalecer sus capacidades para mejorar su calidad de vida.

Las personas participantes están organizadas en diez asociaciones de productores y productoras dedicadas a la crianza de aves como gallinas y patos, así como al cultivo de flores y fresas. Sin embargo, enfrentan múltiples desafíos: roles limitados a lo doméstico y productivo, falta de participación en la toma de decisiones y, a menudo, la invisibilización de sus opiniones dentro de sus comunidades.

El proyecto fomenta un enfoque inclusivo y colaborativo, alentando la participación activa no solo de las mujeres, sino también de sus parejas y otros miembros de las organizaciones. Esto busca fortalecer el trabajo en equipo, promover la equidad y prevenir conflictos en las familias y asociaciones. A través de este esfuerzo, queremos que estas comunidades encuentren no solo una fuente de ingreso sostenible, sino también un espacio donde las voces de todos, especialmente de las mujeres, sean escuchadas y valoradas.

Desafíos y Oportunidades para el Desarrollo Sostenible

Este proyecto surge a partir de la solicitud de emprendedoras de las comunidades campesinas de Quispicanchi, y tiene como objetivo fortalecer las cadenas de valor y promover el empoderamiento político y económico de las familias. Con un enfoque integral, trabajamos para mejorar tanto la productividad como la calidad de vida de las y los participantes.

Nos enfocamos en fortalecer las capacidades productivas, ayudando a mejorar la gestión de los emprendimientos y agregando valor a los productos que elaboran. Impulsamos la comercialización ampliando mercados a niveles local, regional y extrarregional. También apoyamos la creación de marcas propias para las asociaciones y fomentamos el uso de tecnologías digitales (TIC) para optimizar procesos y aumentar su alcance.

Facilitamos el acceso a financiamiento, promoviendo una cultura de ahorro y el uso responsable de productos financieros, para que las familias puedan invertir en sus negocios y fortalecerlos.

Además, fomentamos la participación ciudadana y política, especialmente de las mujeres, a través de capacitaciones y acompañamiento para presentar propuestas en espacios como los Presupuestos Participativos. Promovemos la corresponsabilidad entre hombres y mujeres, tanto en el hogar como en los negocios, para reducir las brechas de género y construir una comunidad más equitativa y sostenible.

Con este esfuerzo conjunto, fortalecemos el desarrollo integral de las familias de Quispicanchi, brindando a todos y todas la oportunidad de crecer y prosperar.