Nuestro primer contacto con Chile, fue una hermana con un letrero enorme que ponía SSJJ Taller de solidaridad y una cara sonriente y amable que auguraba buenos pronósticos, como así va siendo en nuestros primeros días. De momento aquí se encuentran Sonia y Ana. Son acogedoras, están muy pendientes de nosotros y nos hacen sentirnos como en casa.
Estos primeros días, en que compartimos algunos espacios, están posibilitando, el conocimiento mutuo, compartir vivencias, historias de vida,…. Cómo entendemos la ayuda a los otros, cómo es el trabajo que realizan, las perspectivas y los objetivos con los que ellas trabajan,…Esto va creando lazos y voy descubriendo que coincidimos en formas de ver las situaciones y los planteamientos. A veces pienso que aunque solo fuera por esta comunicación y este compartir ya merecía la pena haber venido.
Colina es una comuna del área metropolitana, a 14 Kms de Santiago de Chile hacia el norte. Junto con las comunas de Lampa y Til-Til pertenecen a la provincia se Chacabuco, siendo Colina la capital provincial. Tiene una población de 113 340 habitantes según censo de hace 3 o 4 años.
La casa de las siervas se encuentra en Colina, es sencilla pero muy acogedora. En el mismo lugar tienen dependencias donde se desarrollan casi todas las actividades que se realizan.
El proyecto de las siervas de San José en Colina tiene dos líneas muy marcadas: Talleres Nazaret, que se centra en el trabajo con mujeres a través de talleres de capacitación, reconocidos por el ministerio educación y el centro Bonifacia Rodríguez que realiza talleres con niños, de 6 a 18 años, agrupados según edad, en tres niveles. Los requisitos para asistir es estar escolarizados y son voluntarios.
Al día siguiente de llegar nos encontramos, con las monitoras del taller. El grupo está integrado por 4 monitoras (Foto del primer encuentro 1), algunas de ellas asistentes a los talleres en su infancia y cuya asistencia les ha permitido cumplir sueños en su vida, como el poder estudiar. Además había dos chicas técnicas en educación, haciendo prácticas.
Nos acogieron amablemente, se presentaron y nos explicaron en que consistían las actividades. También mostraron interés por nosotras, lo que hacemos en nuestro país, formas de pensar,…. Uno de los temas que salió en la conversación fue la maternidad, una de las chicas en práctica está embarazada. Las niñas en Chile en los sectores donde nosotros nos encontramos tienen hijos a los 15 , 16…años. Ellas han comenzado a descubrir que eso las limita y las impiden conseguir sueños, como estudiar.
A partir de ese día nos hemos ido integrando en las actividades que se hacían con los niños. En estos momentos son actividades con mayor contenido lúdico, ya que los niños se encuentran en sus vacaciones de invierno.
Nuestra actividad estos días ha consistido:
En participar en las actividades de los niños (talleres de divertimiento, excursión a Pomaire , una localidad a 60 Kms de Santiago en la que se hace artesanía de barro, o visionado de una película ). Los niños pasan en los talleres tres tardes a la semana de 15,00 a 19. Era tan importante hacer esas pequeñas excursiones que había niñas que habían estrenado ropa nueva para ir. Me emocionó comprender como estas pequeñas actividades para nosotros, eran tan importantes para ellas. Pensaba en nuestros niños y niñas españoles que tienen de todo y no lo valoran. Los viernes por la tarde se hacen talleres en las poblaciones.
Visitas domiciliarias Las familias en este contextos son familias con alto nivel de violencia intrafamiliar, violencia de género, familias monoparentales, donde las madres, comienzan a tener hijos a los 15 años, teniendo hijos con diferentes parejas, que no siempre asumen su manutención. No es raro encontrar familias con miembros drogodependientes o que se encuentran en la cárcel (Colina tiene dos cárceles una de ellas de alta peligrosidad). En ocasiones, son las abuelas las que se tienen que hacer cargo de los nietos. También existe un alto porcentaje de personas inmigrantes, especialmente procedentes de Haiti y Republica Dominicana. En los últimos años se ha incrementado la inmigración, lo que está provocando que el gobierno promueva mayor regulación legislativa.
Conocer el entorno, las instituciones con las que el centro Bonifacia trabajan en red , Hemos tenido entrevistas con la OPD , Oficina de protección de derechos de la infancia que evalúan la vulneración de los derechos y, que todos los ayuntamiento tienen, o Senda servicio nacional de prevención en consumo de alcohol y droga, en este último nos comentaban que el consumo se había disparado en la población adolescente, existiendo centros de secundaria con un 80% de alumnado consumidor. El tráfico de drogas es otra de las características de esta localidad.
Pero sobre todo lo que querría destacar de estos días, es el aspecto más humano. No son las actividades de los talleres en sí mismo, lo que más me ha impresionado, esto quizás los pueda hacer mucha gente. Lo que más me ha llamado la atención, es la preocupación por el niño de forma integral. Mirar y e intentar comprender, más allá de la apariencia externa y lo más visible.
Es un compromiso con la infancia y los derechos de los niños, cuyo objetivo es dar una respuesta que mejore su vida. Esto les lleva, a conocer el lugar donde viven, saber porque faltan a veces, si están sufriendo algún tipo de violencia, colaborar con las familias en necesidades, sociales, psicológicas, económicas….tener contacto con los centros educativos,…
En suma tender la mano y hacer un acompañamiento que ayude a los niños y niñas a tener sueños, luchar por ellos y poder salir del círculo de exclusión social, que sin ayuda difícilmente podrían conseguirlo.
C. A. R.
Colina-Chile
Ana Pizarro
Ana, qué maravilla!!! Espero que tu sueño se esté haciendo realidad y puedas llegar a esas personas que tienes a tu alrededor, a las que estoy segura, les darás lo mejor de ti!!!
Disfruta de ellos y con ellos. ?